Agustín Gómez
" La clave del éxito está en la capacidad de adaptarse al cambio y entender realmente las necesidades de los usuarios. "
Bio
Innovación digital, Emprendimiento y Cambio de Paradigma
Agustín Gómez, cofundador de Wallapop, es un visionario emprendedor que ha convertido cada desafío en una oportunidad para reinventarse. Desde su paso por la consultoría internacional hasta el éxito arrollador de la startup, Agustín ha sabido fusionar innovación, intuición y resiliencia. Su liderazgo llevó a Wallapop a convertirse en la aplicación número uno en España, transformando la economía colaborativa. Tras enfrentar una crisis personal y un diagnóstico de cáncer, Gómez encontró en la adversidad la fuerza para redescubrir su propósito y seguir impactando positivamente desde el mundo del emprendimiento.
Agustín Gómez es un emprendedor español que ha sabido transformar cada desafío en una oportunidad para crecer y reinventarse. Graduado en ingeniería de telecomunicaciones, Gómez comenzó su carrera profesional en el mundo de la consultoría, trabajando en varios países, desde Suiza hasta Estados Unidos, donde adquirió una visión global y la habilidad para comprender los distintos matices de los mercados internacionales. Sin embargo, a pesar del éxito en este sector, Agustín se vio envuelto en una crisis personal que lo llevó a reconsiderar su propósito y su camino profesional.
Fue en este punto crucial cuando decidió dejar atrás la seguridad de su carrera y lanzarse al mundo del emprendimiento, impulsado por una fuerte intuición y el deseo de crear algo que conectara a las personas. En 2013, junto a David Muñoz, cofundó Wallapop, una aplicación de compra-venta de segunda mano que revolucionó la economía colaborativa en España. Lo que diferenciaba a Wallapop era su enfoque en la cercanía y la interacción comunitaria, aprovechando la geolocalización para facilitar el intercambio de objetos de forma local, como en los tradicionales mercadillos de barrio, que no solo ofrecía una solución innovadora para el consumo responsable, sino que fomentaba además la creación de comunidades más cercanas.
El éxito de Wallapop fue abrumador desde el principio. Bajo la dirección de Agustín, la aplicación rápidamente se convirtió en la número uno en España, y pronto se expandió a mercados internacionales como Francia e Inglaterra. La visión estratégica y el liderazgo de Agustín atrajeron la atención de importantes inversores de importantes fondos de capital, consolidando Wallapop como un actor clave en la economía digital y un referente en el sector de la economía colaborativa.
Cómo normalmente en todo emprendimiento, el camino no estuvo exento de obstáculos y a pesar de los desafíos que se iban presentando en el camino, su visión y perseverancia lo llevaron a seguir adelante. La filosofía de «victoria o muerte», que infundió en su equipo, fue clave para superar los momentos más difíciles, logrando no solo mantener la empresa a flote, sino hacerla crecer exponencialmente. Sin embargo, después de liderar una ambiciosa expansión internacional que incluyó mercados como México, Brasil y Estados Unidos, Agustín tomó la difícil decisión de dejar el puesto de CEO tras la venta de la filial estadounidense.
Tal y como nos cuenta personalmente en su relato, Victoria o muerte: el viaje de un loco “startupero” hacia el éxito, recogido en el Capítulo ll – La intuición transformadora del libro de ECONOMÍA HUMANA, la vida volvió a ponerlo a prueba cuando fue diagnosticado pocos meses después con cáncer. Esta experiencia lo llevó a una reflexión profunda, y a conectarse más con su intuición y espiritualidad. Para Agustín, su proceso de recuperación fue un misterio multifactorial, en el que la apertura mental y la disposición a enfrentar la adversidad jugaron un papel crucial. Esta nueva etapa lo ayudó a redescubrir su propósito y a enfocarse en el bienestar integral, tanto personal como profesional.
Hoy en día, Agustín Gómez sigue explorando nuevas oportunidades con la misma pasión que lo impulsó a fundar Wallapop. Su trayectoria, marcada por la resiliencia, la intuición, la fe en uno mismo y la capacidad de transformar desafíos en triunfos, es un ejemplo inspirador para emprendedores de todo el mundo. Su historia no solo es un testimonio de éxito en los negocios, sino también de la importancia de la evolución personal y la búsqueda constante de significado, que revierten en el deseo imparable de crear un impacto positivo en la sociedad.
Amigo y colaborador cercano, es miembro activo del Club de Inversiones Regenerativas de Economía Humana y participa en el Máster Internacional de Economía Humana (MIEH), compartiendo aprendizajes personales y experiencias valiosas con futuros emprendedores y empresarios.