“Las buenas decisiones vienen de la experiencia y la experiencia viene de las malas decisiones”.
Éste es un dicho generalmente aceptado. Los errores generan aprendizajes susceptibles de usarse en el futuro para mejorar las decisiones que se toman en esos mismos contextos. Antonio Campos
Pero, ¿cómo hacemos para optimizar las decisiones que hay que tomar en situaciones que se han presentado muy pocas veces, o incluso nunca antes? ¿Y si además, afectan a aspectos fundamentales de las vidas de las personas, como por ejemplo, al patrimonio familiar?
Cuando alguien se propone comprar o vender su piso o casa se enfrenta a un proceso generalmente desconocido que le suscita múltiples dudas, cuyo protagonista es el bien material más preciado por la familia: su vivienda.
Las opciones por las que se puede decantar el propietario vendedor para disminuir sus riesgos son varias: pedir consejo a alguna persona cercana que le aporte la experiencia de la que carece, investigar en Internet para dar respuesta a sus dudas, o ponerse en manos de profesionales del sector.
En caso de “apoyarse” en la experiencia de otras personas, hay que tener en cuenta que la casuística es variadísima. Es decir, aunque el proceso de venta se compone de una serie de fases prácticamente idénticas en la mayoría de ocasiones, las particularidades de cada fase pueden dar lugar a escenarios inciertos, a los que quizás tampoco se ha enfrentado ese asesor personal.
Cuando se busca en Internet la información, no siempre es fácil desenmarañar los aspectos relevantes que tienen que ver con procesos de cierta complejidad como la compraventa de un inmueble.
Por último, ponerse en manos de un experto requiere, a menudo, vencer la desconfianza que genera un sector con cierto nivel de intrusismo pseudo-profesional que en los últimos tiempos ha estado demasiado enfocado en la maximización de beneficios, descuidando a las personas y sus necesidades.
Para dar respuesta a las necesidades descritas, en su compromiso por garantizar el mejor servicio para su comunidad, Economía Humana me propuso liderar un nuevo servicio inmobiliario coherente con las claves y principios recogidas en su manifiesto. Y yo, sin dudarlo, acepte este apasionante reto.
Me llamo Antonio Campos, soy profesional y director de una oficina inmobiliaria que pertenece a Don Piso. Marca escogida como mejor agencia por los consumidores en 2018. Entre otros aspectos, destaca su compromiso con ACNUR, con la promoción del deporte local, así como su colaboración con el Banc de Sang i Teixits.
En Don Piso, no comercializamos pisos de bancos por cuestiones éticas. Estámos comprometidos con valores como la transparencia y el asesoramiento integral y continuado hasta la finalización de la compraventa. Además de un servicio profesional y flexible totalmente adaptable a las necesidades del vendedor, comprador y arrendatario.
Fruto de la colaboración con Economía Humana, vamos a ofrecer el servicio de “armonización del hábitat”. Una nueva experiencia piloto que contempla los intangibles como parte importante del proceso de compraventa y que está orientado a encontrar el punto de equilibrio que favorezcan a todas las partes.
Se trata de una nueva visión y otra forma de entender los servicios inmobiliarios en los que las personas y su calidad de vida están en el centro de las decisiones.
Esta innovadora experiencia se articulará a través del equipo de Habitat Humano en colaboración conmigo y la inmobiliaria que dirijo. Es el principio de un camino de transformación que puede ser clave en un sector tan importante para la vida de las personas y de la evolución de la sociedad.
Antonio Luis Campos Botella
Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universitat de Barcelona. Máster Universitario en Programación Neurolingüística por la Universitat de Lleida.
Más de catorce años de experiencia en el sector de la intermediación financiera e inmobiliaria.
Actualmente, director de una oficina de donpiso en el centro de Badalona (Barcelona).